La primera lluvia de estrellas de 2023 la podremos observar el 4 de enero. Son las Cuadrántidas.

Pero, ¿qué es una lluvia de estrellas o lluvia de meteoros? Según el IGN (Instituto Geográfico Nacional), “se llama meteoro al fenómeno resultante de la penetración de una partícula de materia (meteoroide) en la atmósfera a gran velocidad. La vaporización de la partícula por su colisión con las moléculas del aire produce una luminosidad que hace observable este fenómeno. Su duración suele ser de una fracción de segundo. La altura a la que el meteoro se hace visible es del orden de 100 kilómetros, aunque depende un poco de la velocidad de penetración, evaporándose a mayor altura las partículas que inciden a mayor velocidad. Las partículas de tamaño entre una décima de milímetro y algunos centímetros se consumen totalmente por encima de los 50 kilómetros, aunque el gran brillo y velocidad transversal de alguno de ellos los haga aparecer próximos al observador. Sólo algunos meteoroides, de masa inicial suficientemente grande (>1 kg) y de consistencia muy sólida (rocosa, metálica), llegan al suelo cada día, pasando a denominarse meteoritos”.

¿De dónde vienen estos meteoros?

Lo que conocemos como lluvia de estrellas o lluvia de meteoros son restos de partículas de los cometas, que en su trayectoria alrededor del Sol, emiten un rastro de partículas de polvo. Cuando estas partículas atraviesan la capa atmosférica de la Tierra, se desintegran, dando lugar a las famosas lluvia de estrellas.

¿Cómo podemos ver las Cuadrántidas?

Lo ideal para ver cualquier lluvia de estrellas es irse a un lugar oscuro, con el cielo despejado y lejos de la contaminación lumínica. En 2023 contamos con la Luna muy cerca de su fase de Luna llena, lo que dificulta observar la lluvia de meteoros de una manera clara.

Para poder observar mejor cualquier lluvia de estrellas debemos mirar hacia el radiante, o el punto donde se originan los meteoros. En el caso de las Cuadrántidas, se originan en un asteroide descubierto llamado el 2003 EH1, cerca de la cola de la Osa Mayor. Pero si no has podido ver las Cuadrántidas el 4 de enero, no te preocupes, estarán activas, aunque en menor intensidad, hasta el 12 de enero.

¡Nos vemos bajo las estrellas!

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